29 agosto 2010

Dice Eco:


“Los humanos tenemos dos padecimientos: uno es que no recordamos todo lo que quisiéramos y el otro es que tampoco podemos olvidar todo lo que nos gustaría. Nos quejamos por falta de memoria cuando la necesitamos pero pedimos olvidar cuando los recuerdos nos atormentan. Solo la diversión puede ser usada como ars obliovionalis, arte del olvido. No se puede destruir el significado de algo dicho en voz alta, pero se puede pronunciar al mismo tiempo otra afirmación de modo que las voces se superpongan. No podemos olvidar por propia voluntad, pero si existe un artificio para recordar mal: hay que multiplicar la semiosis. Vale decir que no se olvida por supresión sino por superposición; no produciendo una ausencia sino multiplicando presencias.”


¿Y quién no quiere más recuerdos para olvidar lo que alguna vez gritó?

2 comentarios:

Angelux dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
FerPaz dijo...

Humbertito se equivocó (me doy el lujo de decirlo!), un clavo DOES NOT saca a otro clavo.

Recuerdos creados con la finalidad particular de tapar anteriores gritos, no tienen sentido en su ser...

Hacé recuerdos, dejálos hacerse, que se generen por el propio hecho de salirse de tus entrañas y visitar el mundo exterior.

Además, olvidar no nos serviría para aprender.